psicologíaLa importancia de la rutina y los hábitos en la infancia
La importancia de la rutina y los hábitos en la infancia
¿Qué son las rutinas?
Las rutinas son costumbres y hábitos que vamos adquiriendo a lo largo de nuestra vida y que nos ayudan a estructurarnos y a desarrollar nuestro día a día de una forma más o menos automática, y, por tanto, óptima.
¿Por qué es importante que establezcamos rutinas en casa?
Establecer rutinas, nos permite adquirir un sistema de trabajo más autónomo, así como consolidar aprendizajes. De hecho, los niños y niñas que crecen en familias que tienen unas rutinas establecidas se caracterizan por:
Se sienten más seguros y tranquilos, puesto que todo es más previsible. Saben que se espera de ellos en cada momento y cómo debe hacerse. Esto tiene un impacto positivo en la sensaciónde control. Manifestándose con una reducción de la ansiedad, así como a sentirse seguro en el entorno que les rodea.
Tienen los límites claros, y, por tanto, hay menos discusiones en casa.
Se establecen hábitos y rutinas saludables como; una correcta higiene, una alimentación equilibrada, o la definición de los ritmos circadianos del sueño. Lo que se traduce en un mejor descanso y, por tanto, mejor humor y mejor funcionamiento.
Automatizan los procesos, siendo más autónomos e independientes. No necesitan tanta ayuda del exterior y se vuelven cada vez más responsables, asumiendo nuevas tareas que les hacen sentir útiles y capaces. Lo que fomenta el desarrollo positivo de su autoestima.
Les ayuda a organizarse y administrar su propio tiempo.
Si toda la familia forma parte de estas rutinas y ese equilibrio, se ve reforzado el vínculo emocional entre todos.
Todo esto produce equilibrio emocional en el niño y en la familia. Así como le ayuda a definir su personalidad futura y el desarrollo de virtudes como la planificación, la organización, la puntualidad, el trabajo, la responsabilidad, la cooperación, la perseverancia y la constancia.
¿Es factible establecer rutinas en casa?
Emmm… esta es una pregunta muy compleja. La teoría es muy bonita y muy coherente, pero en una sociedad en la que prácticamente trabajan todos los progenitores con jornadas laborales poco conciliadoras es muy difícil. Todos estamos cargados de nuestro día a día (responsabilidades, entorno laboral, facturas, etc.), y además, cada uno tiene su propio bagaje personal (hay quien ha vivido en un ambiente muy sano y eso les ha permitido generar virtudes positivas que les ayuden a establecer estas rutinas, pero también hay personas que no han crecido en este ambiente sano, sea por un exceso de sobreprotección o de conflicto, por lo que esta tarea les es más difícil). Otro factor clave es si contamos con ayuda de abuelos, tíos, o canguro, y de sí estas personas nos ayuden realmente al establecimiento de rutinas y hábitos, o son una fuente desestabilizadora. Ya sea porque tenemos una relación cercana pero tirando, o porque desautoricen todos los límites que ponemos.
Yo os haré una confesión. A mí establecer rutinas es algo que me cuesta mucho. Soy consciente de que por mi tipo de trabajo no siempre estoy disponible o no estoy tan presente como quisiera, y a veces no puedo formar parte de esa rutina. Así que me permito aceptar que no todo siempre sale como quiero, y me comprometo día a día a establecer pequeños hitos. Si no puedo controlar todas las rutinas, me planteo: ¿en cuál si puedo comprometerme?, y me comprometo hasta que se alcanza, y entonces puedo dedicarme a otra. Así que no os preocupéis si ahora mismo no podéis con todo. ¡Recordad que cada pequeño cambio es un gran avance y cada vez estáis más cerca de la meta! 🙂
¿Y bien? ¿Cómo vivís vosotros el establecimiento de rutinas?
PD: quiero dar las gracias a las maestras y educadoras de la escuela de mi hija. Porque gracias a ellas, su profesionalidad, su formación continuada, sus ganas y su cariño (entre otras muchas virtudes), y teniendo en cuenta el exceso de ratio al que se ven sometidas, mi hija ha adquirido muchas rutinas. Y esto es una inversión valiosísima para su futuro. ¡Os estaré siempre inmensamente agradecida! <3 ¡Espero que todas las madres y padres tengáis la misma suerte que yo!
La importancia de la rutina y los hábitos en la infancia
¿Qué son las rutinas?
Las rutinas son costumbres y hábitos que vamos adquiriendo a lo largo de nuestra vida y que nos ayudan a estructurarnos y a desarrollar nuestro día a día de una forma más o menos automática, y, por tanto, óptima.
¿Por qué es importante que establezcamos rutinas en casa?
Establecer rutinas, nos permite adquirir un sistema de trabajo más autónomo, así como consolidar aprendizajes. De hecho, los niños y niñas que crecen en familias que tienen unas rutinas establecidas se caracterizan por:
Todo esto produce equilibrio emocional en el niño y en la familia. Así como le ayuda a definir su personalidad futura y el desarrollo de virtudes como la planificación, la organización, la puntualidad, el trabajo, la responsabilidad, la cooperación, la perseverancia y la constancia.
¿Es factible establecer rutinas en casa?
Emmm… esta es una pregunta muy compleja. La teoría es muy bonita y muy coherente, pero en una sociedad en la que prácticamente trabajan todos los progenitores con jornadas laborales poco conciliadoras es muy difícil. Todos estamos cargados de nuestro día a día (responsabilidades, entorno laboral, facturas, etc.), y además, cada uno tiene su propio bagaje personal (hay quien ha vivido en un ambiente muy sano y eso les ha permitido generar virtudes positivas que les ayuden a establecer estas rutinas, pero también hay personas que no han crecido en este ambiente sano, sea por un exceso de sobreprotección o de conflicto, por lo que esta tarea les es más difícil). Otro factor clave es si contamos con ayuda de abuelos, tíos, o canguro, y de sí estas personas nos ayuden realmente al establecimiento de rutinas y hábitos, o son una fuente desestabilizadora. Ya sea porque tenemos una relación cercana pero tirando, o porque desautoricen todos los límites que ponemos.
Yo os haré una confesión. A mí establecer rutinas es algo que me cuesta mucho. Soy consciente de que por mi tipo de trabajo no siempre estoy disponible o no estoy tan presente como quisiera, y a veces no puedo formar parte de esa rutina. Así que me permito aceptar que no todo siempre sale como quiero, y me comprometo día a día a establecer pequeños hitos. Si no puedo controlar todas las rutinas, me planteo: ¿en cuál si puedo comprometerme?, y me comprometo hasta que se alcanza, y entonces puedo dedicarme a otra. Así que no os preocupéis si ahora mismo no podéis con todo. ¡Recordad que cada pequeño cambio es un gran avance y cada vez estáis más cerca de la meta! 🙂
¿Y bien? ¿Cómo vivís vosotros el establecimiento de rutinas?
PD: quiero dar las gracias a las maestras y educadoras de la escuela de mi hija. Porque gracias a ellas, su profesionalidad, su formación continuada, sus ganas y su cariño (entre otras muchas virtudes), y teniendo en cuenta el exceso de ratio al que se ven sometidas, mi hija ha adquirido muchas rutinas. Y esto es una inversión valiosísima para su futuro. ¡Os estaré siempre inmensamente agradecida! <3 ¡Espero que todas las madres y padres tengáis la misma suerte que yo!
Natàlia Sellarés Berengué
Psicóloga General Sanitaria en Ikigai Manresa y en CDI Espai Viu de Sant Tomàs
Colegiada 26739
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